De los valores y anti-valores venezolanos
Miguel Á. Pérez Pirela*
La revolución venezolana en este momento histórico apuesta a la consolidación de un fundamento político y moral de dimensiones históricas cristalizado en la reforma de la Constitución.
Pero suele pasar que, por estarse forjando importantes realidades, las esenciales pasen por debajo de la mesa. De ahí una necesaria interrogación: ¿dónde ha quedado la discusión de los valores morales del venezolano contemporáneo?
Si de hecho existen valores morales y políticos que fundamenten el cotidiano del venezolano, es justo preguntarse hoy día sobre la identidad y aplicación de los mismos.
Pero hay que aclarar que no hablamos aquí de valores universales, metafísicos o hipotéticos. Se trata de realizar un esfuerzo fenomenológico y extraer de las actitudes, acciones y modos de pensar de los venezolanos, los valores que están debajo de su accionar.
No cabe la menor duda que existe una preocupación generalizada sobre los modos de actuar de nuestros compatriotas, que parecen asomar la existencia de valores individualistas como fundamento de sus creencias, deseos y objetivos.
Es imprescindible preguntarse entonces, ¿qué es un valor individualista? Primero que todo hay que aclarar que valor individualista no es sinónimo de valor individual. El individualismo sería más bien la dogmatización y perversión de este último.
El pensador francés Alexis de Tocqueville escribía en su Democracia en América, justo en los años en que Bolívar emprendía la revolución por el continente, que el individualismo es algo mucho más profundo, complejo y peligroso que el egoísmo. Mientras que el egoísmo siempre ha existido, el “individualismo es una expresión reciente que ha creado una idea nueva: nuestros padres no conocían sino el egoísmo”. Diríamos entonces con Tocqueville que el egoísmo es un rasgo natural del hombre que tiende a colocar en primer plano el ego, es decir, el yo.
Por el contrario, el individualismo es un fenómeno y una patología moderna que, no sólo coloca el propio yo como centro de gravedad, sino que además hace de esta actitud un valor moral. ¿Qué significa ello?
Hacer del yo un valor moral quiere decir hacerlo un imperativo, elevarlo al rango de deber ser. Como lo ejemplifica el sociólogo Christopher Lasch en La cultura del narcisismo, según el individualismo, tú estás llamado a buscar sólo tus propios intereses; si actúas pensando únicamente en ti, estás haciendo el bien. He aquí el origen de las teorías de auto-superación o de éxito empresarial – cuyas publicaciones inundan nuestro país – que colocan como modelo a seguir el “emprendedor” o “manager” exitoso que piensa únicamente en sus propios intereses, cueste lo que cueste socialmente.
Figuras que, dicho sea de paso, ilustran y fundamentan el neo-liberalismo y su instrumento primordial, el capitalismo. El mensaje que se esconde detrás de dichas posturas invita a la felicidad, goce, bienestar y disfrute exclusivamente desde el punto de vista individual.
Todo ello, claro está, en franca oposición a los valores sociales – fundamento de toda revolución – los cuales son vistos como trabas o impedimentos al desenvolvimiento del propio yo.
El mundo desde esta perspectiva es visto como un campo de batalla donde sólo los más individualistas han de sobrevivir, ser protagonistas y líderes. En otras palabras, aquellos que no ahorran energías en ganarse un puesto importante y mantenerlo, acumular el mayor capital posible en negocios, amistades influyentes, sueldos desmedidos, favores debidos, desproporcionados bienes, etc.
La pregunta surge entonces espontáneamente: ¿cómo forjar sinceramente y, sobre todo, empíricamente nuevos paradigmas sociales en Venezuela, si estos están fundamentados en valores individualistas?
Responder a ello nos dará luces sobre el cómo habrá de encararse, en términos de valores, la histórica apuesta antes planteada, es decir, la reforma de la Constitución.
Lo que queria saber era, algunas reflexiones de los antivalores en la sociedad venezolana si tienes la respuesta por favor me la mandas… La necesito
Gracias
hola. necesito saber algunos valores y antivalores de la sociedad venezolana.
La necesidad obliga generar una poderosa fuerza motriz para el desarrollo de las fuerzas productivas en nuestro país, de nustras naciones y por ende en nuestro departamentos,y regiomes; iniciando por La democratización del país que servirá por ende a toda la región. No habrá desarrollo sin democratización. Por tal razón la necesidad de Iniciar el proceso de democratización comenzando por el restablecimiento de los derechos, beneficios y libertades democráticas que ya se habían ganado pues lo teníamos muchas de ellas escritas en el papel. Formas culturales de creatividad, imaginación, flexibilidad planificación, orden, disciplina, responsabilidad, voluntad de desarrollo productivo en forma cooperativa o asociativa, decisiones con identidad regional, todo esto poniendo en práctica el irrestricto derecho a libertad de las opiniones posiciones, planteamientos políticos y se imponga en debate públicos, las que deben ser bien fundamentados con ideas claras y comprensibles por el pueblo; para luego que luego se aplique, y se tome lo más correcto, lo más justo, el que beneficia a la gran mayoría del pueblo. Así mismo tenemos la obligación de sistematizar y sintetizar la rica experiencia generada por nuestro pueblo, elevar su calida y capacidad creadora lo que permitirá conseguir más rápidos, mejores y más económicos resultados en todos los campos de nuestro trabajo. Si el pueblo es plenamente movilizado y se hacen arreglos adecuados, es posible llevar a cabo tanto la Revolución Cultural como la producción sin que sea afectada ni la una ni la otra, y garantizar una elevada calidad en todo nuestro trabajo. solo asi abansaremos en ir bariendo el exasevado individualismo, el culto al individualismo, como bien lo dices corresponde a una deformacion mostrusade la humanidad
Estimadas/os compañeros/as. Quisiera compartir con uds. algunas reflexiones iniciadas hace algún tiempo, y que parecen pertinentes a la discusión planteada por Miguel Pirela y comentada por el compañero Wagner. En los procesos de transición (que como tal deben comprenderse), valores y ¿antivalores? conviven en una compleja y dinámica amalgama, tanto en la Sociedad como en cada uno de sus miembros, nosotros. Por tanto los compromisos se expresan en el esfuerzo por construir y reconstruir constantemente los valores sociales propios del proceso que estamos viviendo. LA REVOLUCIÓN. Una revolución que va a ser tan socialista como lo seamos todos. A esto del individualismo que llevamos por dentro, y en el cual fuimos formados, y que además es la columna vertebral de la mayoría de los pemsum de estudios en todos los niveles, hay que ponerlo en el centro de la discusión.
En mi opinión, Y CON TODO RESPETO, no parece el camino mas directo decir: «se hacen arreglos adecuados, es posible llevar a cabo tanto la Revolución Cultural como la producción sin que sea afectada ni la una ni la otra», siguiendo a Lampedusa, pues el reformismo definitivamente no conduce a la revolución.
En relación a lo anterior, cada vez está más claro que el Socialismo Bolivariano (escrito con mayúculas pues es nombre propio), puede parecerse e inspirarse en otros sistemas de ideas, pero, va a ser lo que nosotros seamos capaces de construir. La Solidaridad como valor implica la comprensión (el entender) el egoísmo, que ahora llamamos antivalor, pero que en los noventa era el paradigma preferido, y que puede estar constituyendonos todavía y por mucho tiempo en la medida en que siga escondido y disimulado, colándose timida pero solídamente en nuestro discurso.
Me gustaría discutir con aquellos/as de ustedes que así lo consideren y tengan posibilidad y tiempo de hacerlo, un artículo publicado en el 2006, del cual inserto a continuación un pequeño parrafo. (Para aceder al artículo completo pueden buscar en Scielo. Revista Salud de Los Trabajadores Vol. 14. Nº 01 año 2006.)
«DEL INDIVIDUO AL CIUDADANO
Este Sistema Social Intersolidario, se identificaría simultáneamente con las libertades individuales y con los compromisos colectivos indispensables para el funcionamiento de ambos sistemas, el ser humano y la Sociedad. Estos compromisos constituirían (como propiedad emergente) la noción de ciudadanía, y superarían al individualismo, como característica incompatible con el funcionamiento del Sistema Social Intersolidario, más no a la individualidad, entendida como aquellas propiedades de la parte (el individuo-ciudadano) que pudieran no ser del todo y que representan su autonomía. Es la unidad (como sistema social) en la diversidad de las individualidades de los seres humanos que se constituyen y emergen como ciudadanos en el seno del Sistema Social. Morín lo expresa así: “Todo desarrollo verdaderamente humano debe comprender el desarrollo conjunto de las autonomías individuales, y la conciencia de pertenecer a la especie humana”. (Morín 1999-1).
Por último, me gustaria que pudiera discutirse (sabemos que no resolverse) la distinción entre lo moral y lo ético-político. Los «valores morales» pudieran estar reñidos con lo ético o viceversa. El caso de la ilustre Conferencia Episcopal Venezolana es emblemático en este sentido.
Agradeciendo su atención y paciencia, y pidiendo nuevamente excusas por disentir sanamente.
Pedro Villasana
En relación a esto de los valores y la moral, me permito señalar un extracto del discurso dado por el pensador marxista venezolano Daniel de León en Boston en 1886.
«….En otros tiempos, los hombres se comían a sus enemigos;sólo cuando se dieron cuenta del mayor provecho que podrían obtener de ellos haciéndolos esclavos,llegó a ser «inmoral» el canibalismo. Cuando, mucho más tarde, el progreso de los medios de producción hizo más beneficioso para la clase dominante, contar con un suministro constante de trabajadores libres a quienes imponer, en el mercado abierto, salarios de mera subsistencia, llegó a ser inmoral la esclavitud….»
Saquen uds mismos sus conclusiones.
De Daniel de León les puedo decir lo siguiente,cito:
» Daniel de León, a quién considero como uno de los socialistas modernos más grandes, es el único que ha agregado algo al pensamiento socialista de Carlos Marx. El estado industrial en la forma concebida por De León deberá finalmente ser la forma de gobierno en Rusia.»
Vladimir Lenin.
La cita de Lenin es tomada de un artículo de John Reed publicado en el Daily People el 11 de Mayo de 1918, con motivo del cuarto aniversario de la muerte de este ilustre y desconocido pensador marxista venezolano.
Todo el texto proviene de «El padre del Sindicalismo Norteamericano» de Rodolfo Quintero, ediciones UCV, 1979.
Cuales son los valores de la sociedad venezolana
Tal vez los del hombre universal. La creatividad y flexibilidad, sin dudas.
Sobre la actualidad de los valores universales, me gustaria pensar que con el proceso de la revolucion la sociedad venezolana se acerca a la praxis de la solidaridad y libertad.
La igualdad podria ser un proceso lento, pero seguro, desde una perspectiva utopica.
Con agrado observo como la gente mas necesitada esta siendo atentida por la revolucion. Aunque ello pueda redundar en mi desempleo .
Ojala y las cosas se calmen y las personas en general se acostumbren a una sociedad para la igualdad real.
Males enquistados como la anarquia, el amiguismo, paternalismo, el conflicto como forma de relacion resultan antivalores tolerados, en cambio .
Puede resultar muy incomodo vivir en un pais como venezuela, politizado, un poco egolatra todavia, cargando con el estigma de la riqueza .
Las clases pudientes continuan con la misma mentalidad pantallera. Los antaño desposeidos los imitan e intentan doblegar a los primeros. Es como un juego bastante aburrido para adultos. Pero tal vez no se trate de ningun mal. Todavia el paradigma de la sociedad venezolana lo construyen hombres inmaduros.
Como venezolana que todavia sufre de los achaques producto de los antivalores, que ta lv ez practica de forma inconsciente, pero que cada vez que puede elige la sinceridad, agardezco la crisis de los 40, el regreso al pais despues de diez años huyendo de la berenjena, la nueva huida, consciente y definitiva a un lugar donde no sea tan dificil practicar la honestidad.
Tres años despues del retorno no premeditado al pais, reconozco que mi caracter se ha moldeado para bien. En cambio la depresion es un mal que todavia me cuesta soltar . Una parte de mi esta convencida de que es importante hacer parte de la ficcion. Ojala y consiga la manera de terminar con el viacrucis pronto. Ojala el espacio fisico espiritual que ansio pudiera estar en Venezuela. De Caracas solo me parecen rescatables las areas verdes , las personas que aunque ocultas disponen de tiempo para descansar, conversar libremente.