¿A qué nos referimos cuando decimos que la tecnología no es “neutra”?
José J. Contreras 1
15 de Abril de 2008.
La amiga Mariangela Petrizzo ha colgado un post en el cual aborda el tema de la neutralidad tecnológica a propósito del uso de un tipo particular de tecnología social: las Plataformas de Networking (PN).
De acuerdo a Petrizzo, lo particular de las PN es que facilitan la interacción entre los miembros. “El tenor, la intensidad, valor y contenido de este tipo de intercambios, dependerá de una intencionalidad que, sin ser neutra, no posee la plataforma en sí misma”.
En la cita anterior, ¿a qué refiere la no neutralidad? ¿a la PN o al “tipo de intercambios”? Supongamos, en principio, que se refiere a la PN. De ser así, habría una contradicción. No tendría sentido que la PN no fuese neutra si “la plataforma en sí misma” no posee nada que encuadre al tipo de intercambios que se da en ella en su tenor, intensidad, valor y contenido. Así que la “no neutralidad” a la que refiere Petrizzo debe ir por otro lado.
Un poco más abajo, Petrizzo nos dice que la no neutralidad podría estar en si la tecnología se usase para filtrar “quien entre allí en función de sus convicciones políticas y es eso, entre otras cosas…”. Ya mostré en una respuesta anterior que en el caso del sitio llamado Facebook (www.facebook.com) ese filtro efectivamente existe puesto que entre las opciones de las “Tendencias Políticas” que brinda el menú de presentación del usuario no existe la opción de “Socialista”. Sin embargo, miles de usuarios de Facebook, que somos izquierdistas confesos, nos hemos reunido en un grupo que se llama “By ‘other’ I mean Socialist” haciendo referencia a la opción de “Otra” en la opción en “Tendencia Política” que sí existe en el menú.
Quisiera entonces indagar más bien en esa “intencionalidad” que refiere más al “tipo de intercambio” y a la que se refiere el “entre otras cosas” de la cita anterior de Petrizzo. En su post, Petrizzo enfila sus baterías a la necesidad de “dar cuenta de los patrones sociales de uso de internet”. De tal modo que, según Petrizzo, el problema de la neutralidad parece ser que para entender la tecnología no podemos desligarnos de sus usos.
Esta afirmación va en la misma onda de la “Ética de la Ciencia” dominante en las últimas décadas. Según esta visión, la ciencia no es ni buena ni mala, el problema radica en sus modos de aplicación. En nuestro caso, las PN no son ni buenas ni malas, son los usuarios los que disponen de ella. Sin embargo, así como en el estudio de la ciencia nos vemos siempre obligados a estudiar cómo es ella usada y aplicada, así debemos estudiar el uso de las PN.
En este orden de ideas, quisiera referime a un tipo de PN particular y que es a lo que se le ha llamado el “Sitio de Red Social” o “Sitio de Red de Socialización” (SRS). Los SRS son espacios en los que se socializa. La metáfora que domina esta visión de sociedad es la de la red. En la red, el otro aparece no como un ser humano que es un fin en sí mismo; tampoco es un prójimo de la misma comunidad de Dios que aspira con-migo a la Salvación; mucho menos un paisano con las mismas raíces comunitarias. No. En el SRS, el otro es, primordialmente, un “nodo” de la red. Nodo que se activa -o desactiva- en el entrelazamiento de miríadas de interconexiones. En la red, somos interruptores que prenden y apagan.
Un SRS en particular, Facebook, maneja un concepto muy interesante que es el de la popularidad. La persona popular es aquella que logra convertirse en nodo central de la red. Los nodos centrales son aquellos con un número mayor de interconexiones que lo cruzan, en comparación con la mayoría. O dicho de otro modo, me hago popular cuando muchos otros nodos hacen “clic” en mi perfil. ¿Qué es un perfil? Un perfil es mi presentación en el SRS. En mi perfil coloco mis datos personales, mis gustos y preferencias, mi tendencia política, mi red de amigos y, muy importante, mis fotos. Las personas más populares tienden a ser aquellas que colocan fotos muy atractivas de sí mism@s. Por cierto, la gran mayoría de la fotografías de las personas populares rayan entre lo muy sensual y lo pornográfico. También son muy populares actores y actrices de cine y televisión y personajes mediáticos como el actual candidato a la Alcaldía de Caracas Leopoldo López.
En un artículo anterior hice referencia a una aplicación que se llama “Friends for Sale” y que, a mi parecer, revela en buena manera el fundamento social de Facebook. En este post, quisiese referirme no a una aplicación (que puedes instalar o desinstalar), sino a una característica del corazón de la socialización en Facebook. Facebook cuenta con un botón para hacer “poke”. Un “poke” es algo así como un guiño o, quizás mejor, un “pequeño roce con el codo”. Fue traducido al castellano como «Dar un Toque». Sirve para llamar la atención de alguien. Si ese alguien lo desea te devolverá el “poke” y sabes que podrás abordarl@2.
A esta altura de la argumentación el lector podrá entender que el “poke” es, simplemente, un toque al nodo. El “poke” es la activación pura y simple. El “poke” no tiene aditivos, no tiene adornos, no tiene propiedades adicionales. Es la conexión en esencia eleática. El «poke» es en la Red Social lo que el «ping» es en la Red Computacional. El “poke” es, sin tapujos, la relación fundamental con el otro en la sociedad enredada. Podrás ser un nodo izquierdista, de ultraderecha o anarquista. Podrás ser un nodo exalumno de X, Y ó Z. Podrás ser un nodo de tal o cual región. Podrás ser un nodo de la corporación fulana o mengana. O podrás ser un nodo de tal o cual religión. A fin de cuentas, eso es lo que eres, un nodo que prende y apaga. Un nodo al que le hacen “poke” o “ping”.
La “neutralidad tecnológica” no puede encuadrarse en un problema de uso. El problema de la tecnología, y su supuesta neutralidad, yace en el modo en que ella dispone a los entes. La sociedad tecnologizada contemporánea se encuentra tan en casa con la metáfora de la red que casi siempre olvidamos que es sólo eso, una metáfora. La sociedad tecnologizada se encuentra tan en casa con la metáfora de la red que mora, tranquilamente, en la reducción del ser humano a un interruptor.
Creo que los SRS, y particularmente Facebook, logra revelar esto con una claridad que no lo he visto en ninguna otra tecnología social. Es entendible que, en términos políticos, la derecha se consiga en casa en este contexto3. Pero, la izquierda, la izquierda izquierda, ¿podrá conseguirse en casa en una sociedad en la que la relación con el otro sea fundamentalmente “prendido-apagado”, “activado-desactivado”, “1” y “0”?
Gráfico tomado del Informe «Análisis de Redes Sociales» de Comuna Seis de Medellín
1Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Tecnologías Libres (CENDITEL) E-mail: jcontreras@cenditel.gob.ve
2 Bueno hacer notar que la innovación del “poke” es, o al menos había sido, exclusividad de Facebook. Ningún otro SRS cuenta, o al menos había contado, con tal posibilidad.
3Ver la Respuesta a la Respuesta Original de Petrizzo para mayor detalle.
Vaya JJ. Nunca imaginé que mi post pudiera leerse … por decirlo así .. de esta forma. Debo decirt que me resulta sumamente curioso el modo en que lo has leído … pues no pensé que pudiera entenderse de lo escrito que yo pretendiera atribuir neutralidad tecnológica al CONTENIDO de los intercambios que una plataforma de networking posibilita, si yo misma hacía énfasis en que había que estudiar el uso mismo de las plataformas por parte de los usuarios.
En fin, creo que lo dicho en mi post era mucho más simple: la tecnología no es neutra y eso es algo en lo que creo totalmente.
Lo que afirmo, además, es que adicionalmente a su no neutralidad, que sería una suerte de dimensión de análisis para la tecnología, coexiste en su manifestación, el resultado de su uso, que ocurre gracias a la intencionalidad de quienes se sirven de ella para sus propios fines. La intencionalidad, espero esté claro ahora, se refiere a la de los usuarios de las tecnologías.
La tecnología ha llegado a ser, hoy día, un producto más del liberalismo (yo no diría capitalismo): déjennos hacer todo cuanto queramos en cualquier ámbito y no nos cuestionen sobre valores/contenidos éticos de todo cuanto hacemos, parece ser la consigna desde hace muchas décadas. Consigna liberal antes, neoliberal ahora, que, por cierto, nos ha llevado a utilizar una misma tecnología para producir exámenes médicos complejos y armas de destrucción masiva.
¿Qué neutralidad o inocuidad tienen los productos?
NINGUNA.
Como producto, la tecnología que se ve a si misma como servicio, servidor y cliente, busca, claro está, su propia supervivencia. De allí que quienes la comercian como producto busquen cualquier modo para incidir en la sociedad en donde ésta tendra lugar. De allí que algo tan absolutamente apasionante y hermoso como el análisis de un fenómeno real (no ficticio, aunque G. Orwell diría que la realidad solo existe en la mente), como las relaciones sociales y las redes que en ese marco se articulan, haya dado para que emerjan, desde hace al menos unos 5 o 6 años las llamadas plataformas de networking o lo que ahora llaman SNS (lo cual me parece, personalmente, un sin sentido porque aceptar que hablamos de «sitios de redes sociales» y no de «plataformas» nos lleva a un análisis segmentado del tema.. pero eso es una opinión personal que no aspiro se convierta en ley :D).
Por cierto, cuando estas plataformas con fines comerciales de networking comenzaban a emerger, un amigo y yo escribimos un artículo que, quizás pueda ayudar a los interesados en ver un poco de cuáles aguas vienen estos lodos: La red de Matrix: ¿En el límite de lo posible? (http://revista-redes.rediris.es/html-vol8/vol8_6.htm). Está disponible desde la revista Redes en esa dirección. Allí pretendemos mostrar lo que entonces era algo así como los primeros intentos en vincular a los internautas entre si más allá de los foros, el correo electrónico, los salones de chat (precursores de la mensajería instantánea) y otras cosas. Esos primeros intentos de plataformas de networking, aunque más orientados a la construcción de una suerte de web semántica (que es otra arista de todo este tema), aún hoy día tienen uso, y grande.
Finalmente, quisiera hacer una reflexión personal, como todas las anteriores :D. Nuestra visión sobre este tipo de tecnologías (que varios llamamos PN y otros llaman SNS :D), sería otra si no hubiera ocurrido el 11-S ni el 14-M. Sólo piensen en ello.
Esto es lo que hay: un mundo con TICs que, en tanto que tecnologías, NO SON NEUTRAS. Así las cosas, o las usamos o las padecemos. Si las usamos, serán reflejo de cuanto seamos y cuanto construyamos de querer ser … si las padecemos, serán reflejo de quienes las usan. Hay mcuho que resolver aún en temas de acceso, pero, aún allí, sigo insistiendo la falta de acceso no está TAN SÓLO signada por resolver la relación «tener vs. no tener computador», o «ser vs. no ser burgués». El acceso a la tecnología cada vez está más y más signado, en nuestro país al menos, por el uso dado a esa tecnología a la que cada vez tenemos más acceso. Al menos, si miramos las cifras que nuestro gobierno (declarado de izquierdas) da. Y ese tema de uso se resuelve con la socialización que queremos construir de ella, es decir con un proceso de aprendizaje orientado en función de cuanto se anhela como sociedad. No de otro modo.
Hablar de la difusión de uso y acceso de TICs, en general, entre personas de izquierda o de derecha, en un mundo totalmente alienado por un pensamiento que cree que aquello en lo que cree es de derecha, creo, es un sinsentido: la izquierda, los de verdadera izquierda, son minoría … y las herramientas que usamos para construir la sociedad, lo muestran así… por mero contraste.
En fin JJ, en buen tono, no sabía que habías respondido a mi post desde tu blog. Pondré el ping a tu respuesta desde el blog de Conocimiento Libre, porque sin estar de acuerdo en muchas de las cosas, me parece que da lugar al debate y eso es, sencillamente enriquecedor.
Agur!
Hola Mariangela,
Siguiendo el buen tono, creo que el post va en el mismo orden de lo que planteas que para estudiar el tema de la «no neutralidad» debemos revisar los «patrones de uso». Y en ello, en resumidas cuentas, hay – o puede haber – una trampa, porque ya en eso hay un sesgo importante. Mi intervención va en ese mismo orden de ideas que asomas sobre la relación cliente-servidor. Si nos enfocamos en los patrones de uso, se nos pierde eso de «cliente-servidor» que es el fondo.
Un abrazo,
JJ
Por cierto, si fuere el caso de que malinterpreté lo que querías decir. Menos mal que fue así, porque logré sentarme a escribir sobre la «no neutralidad» tecnológica, cosa que tenía tiempo por hacer.
Muchas Gracias,
JJ
Por cierto, un comentario. Antes de escribir el post sobre «Facebook o la Sociedad Enredada» (el 9 de Abril de 2008 ) revisé y volví a corroborar que en el menú de «Tendencia Política» aún no estuviese incluida la opción de «Socialista». De ese momento para acá, no sé cuando, ya la incluyeron. Pues, quizás, sirvió de algo esto… 8)